"Te rondaba silencioso
mientras me mirabas en todas direcciones,
en todos los angulos posibles
y yo solo me lamia los labios.
Me sonreias con nerviosismo,
yo solo te seguia rondando como el lobo
ansioso de seducir por fin a caperucita,
para conseguir que ella lo devorase.
Fue que por fin me abalancé sobre ti,
mis labios estaban desesperados por tu sabor
y solo lamia y lamia de ti
para ver a que sabia tu desenfreno.
Tu espalda... tus hombros...
tus ojos cerrados... tu respiracion rapida...
mi lengua entre tus piernas... tus uñas en mi espalda.
Y fue cuando aparecio tu esencia seduciendome.
Goteabas placer infinito, dulce, prohibido.
Eras un pastel delicioso, que se desbordaba ansioso,
jalabas de mi pelo borracha de placer y delirio,
goteabas dulce y ternura entre tus pechos y entre tus piernas.
Que delicia es tomarse el tiempo...
Que rico es hacer llover entre tus arbustos,
para poder abrir mis labios con una sonrisa
y mojarme de la lluvia de tus labios secretos."
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